miércoles, 13 de marzo de 2024

Los asesinos de la luna de David Grann

Sinopsis:

En los años veinte, la comunidad india de los Osage en Oklahoma era la población de mayor renta per cápita del mundo. El petróleo que yacía bajo sus propiedades les convirtió en millonarios: construyeron mansiones, tenían chóferes privados y mandaban a sus hijos a estudiar a Europa. 
Pero un espiral de violencia asoló esta comunidad indígena cuando sus miembros empezaron a morir y a desaparecer en extrañas circunstancias. La familia de una mujer Osage, Mollie Burkhart, se convirtió en un objetivo principal. Sus tres hermanas fueron asesinadas. Una fue envenenada, otra murió a tiros y la tercera falleció en una explosión. Otros miembros de la los Osage morían en circunstancias misteriosas, y muchos de los que se atrevieron a investigar los crímenes fueron también asesinados. 
Cuando el número de muertos alcanzó los veinticuatro, el recién inaugurado FBI decidió intervenir y fue uno de sus primeros grandes casos de homicidio. Después de que la investigación resultara un desastre, el joven director J. Edgar Hoover acudió al antiguo comandante de Texas, Tom White, para que desvelase el misterio. White estableció un equipo infiltrado, incluyendo a un agente nativo en el grupo.

Opinión:

Hoy quiero hablaros de Los asesinos de la luna, un título que conocí porque en él se basa la película homónima de Martin Scorsese y que tiene como protagonistas a Leonardo DiCaprio y Robert De Niro. Desde este momento ya os adelanto que es un true crime fascinante que deja al descubierto una de las conspiraciones más siniestras de la historia de Estados Unidos.

Sobre los true crime ya os he hablado en alguna otra ocasión; no son más que la reconstrucción de un caso real respaldada con la investigación que se llevó a cabo en ese momento o a posteriori. 
En este caso, David Grann examina los crímenes relatando los hechos que se respaldan con la profunda investigación que él llevó a cabo, dejando al descubierto una conspiración muy elaborada de corrupción. 
Si algo sabemos desde el mismo momento en que leemos la sinopsis es que, en este género criminal que podríamos calificar como crónica negra, vamos a conocer la tragedia que rodea a las víctimas desde el comienzo y que la tensión irá aumentando hasta rozar lo dramático según avancemos en la investigación.

La obra se divide en tres partes.
En la primera parte conoceremos a las víctimas, teniendo como foco central a la familia de Mollie Burkhart, una india Osage que se convirtió en el objetivo principal de este caso. Pero la siniestra red de asesinatos no se frenará ahí, y veremos como otros miembros de la tribu morirán en extrañas circunstancias arrastrando incluso a los que se atrevieron a denunciar los sucesos o a investigarlos.

En la segunda, David Grann cambia el enfoque y lo dirige hacia el grupo investigador y por ende hacia el posterior juicio, ya que cuando el número de víctimas alcanzó la cifra de veinticuatro, el recién inaugurado FBI tuvo que intervenir, convirtiéndose en uno de sus primeros grandes casos de homicidio.

Y por último, en la tercera parte, el foco recae sobre el propio David Grann, relatándonos como fue la profunda y exhaustiva investigación que llevó a desvelar este episodio tan oscuro de la Historia norteamericana y aportando datos que se descubrieron muchísimo tiempo después de que los culpables fueran juzgados. 

Si tuviera que resumir esta novela diría que su autor sigue los pasos del estilo de Truman Capote en su archiconocida A sangre fría
Consigue una excelente reconstrucción de los hechos que mantiene al lector pegado a sus páginas a través de una ambientación perfecta y de la aportación de datos muy interesantes. 
Va a mostrarnos la historia desde el comienzo, desde los primeros años de la década de 1870, momento en que los Osage fueron expulsados de sus tierras en Kansas y trasladados a una tierra, aparentemente sin valor ninguno, en la región nororiental de Oklahoma.

La trama se construye de forma lineal, salvo en algunos puntos en los que es necesaria una retrospección para examinar algunos hechos pasados, pero que serán importantes para el desarrollo de la investigación. 
Tampoco se olvida el autor de hablar sobre la creación del FBI y las técnicas que se empleaban en ese momento. Vamos a ver la evolución de la ciencia criminalística y como lentamente va sustituyéndose el bertillonage, primer método científico utilizado para identificar a los criminales reincidentes ideado en 1879 por el criminólogo francés Alfphonse Bertillon, para dar paso a un método más eficaz y revolucionario: la identificación del criminal a través de la toma de huellas dactilares.

Y ya para terminar...
También conoceremos los primeros pasos del FBI y como se llevó a cabo su modernización, incluyendo sus logros y errores.
El personaje de John Edgar Hoover va a ser un fijo a lo largo de toda la obra, ya que fue el primer director de la Oficina Federal de Investigación y pese a todos los descuidos y disparates, pese a toda la corrupción que sacó a la luz la investigación de este caso, consiguió demostrar que el país necesitaba una policía que abarcase todos los estados, que fuese más profesional y contase con conocimientos científicos, algo que se alejaba de lo conocido hasta el momento.

Espero haberos animado con esta lectura que, como ya os he mencionado más arriba, sigue los pasos del estilo de Capote y del nuevo periodismo, contándonos historias que responden a hechos reales que se convirtieron en noticia.


jueves, 29 de febrero de 2024

La Biblia contada para escépticos de Juan Eslava Galán

Sinopsis:

¿Quién escribió la Biblia? ¿Qué hay de cierto en ella? ¿Cómo se inventa una religión? ¿Existe realmente un Dios omnipotente? A través de estas páginas, Juan Eslava Galán, con su característico estilo desenfadado y cercano, nos responde a todas estas cuestiones y nos propone un sorprendente recorrido por el libro más vendido, traducido y estudiado, a la vez que controvertido, de la Historia: la Biblia. Comenzando por el dios Yavhé, considerado como el verdadero inventor del universo, hasta la llegada de Moisés a la «Tierra Prometida» tras un arduo camino, nos adentraremos en la sabiduría del Rey Salomón, en los entresijos de los profetas, en los pecados de Adán y Eva, en las disputas fraternales de Caín y Abel y en muchas otras bendiciones, traiciones y sorpresas que se esconden tras los protagonistas del Antiguo Testamento.

Opinión:

Tener entre manos un libro de Juan Eslava Galán es siempre sinónimo de entretenimiento y diversión asegurada. 
Para los que no hayáis leído nada de él os diré que juega tanto con las anécdotas y los chascarrillos como con la rigurosidad a la hora de relatar sucesos.
En esta ocasión os traigo hasta esta estantería virtual La Biblia contada para escépticos, una obra analizada y comentada, armada con capítulos muy breves, pero que estoy segura que os va a arrancar más de una carcajada, eso sí, os recomiendo acercaros a ella libres de prejuicios y con una mente muy abierta. 
Esto último lo digo porque, incluso hoy en día, hay quien acepta que el mundo se creó en siete días, que un muerto puede resucitar, y que el pan y el vino de la Eucaristía se convierten en carne y sangre de Cristo. Por supuesto, no seré yo quién les lleve la contraria, no quiero acabar oliendo a churrasco y convertida en sospechosa de herejía. 
Aprovecho este pequeño inciso introductorio para advertiros que para esta reseña me ha sido imposible dejar de lado mis reflexiones personales, por lo tanto, aunque menciono algunos de los temas que se tratan, las apreciaciones son únicamente mías. También he intentado que estuviese libre de sarcasmo. Si lo he conseguido, solo vosotros podréis juzgarlo.

La Biblia como fuente de influencia e inspiración...

La Biblia, como ya sabéis, ha sido el libro más divulgado, más traducido, más impreso, el más vendido e incluso el más estudiado a lo largo de la Historia. Por ese motivo no es raro que se haya convertido en el elemento más influyente, para bien y/o para mal, en el destino de la humanidad. 
En cuanto a esto, habría que dejar claro que el libro no ha sido el culpable del mal uso que se haya podido dar a lo plasmado en él. Si hubiese que señalar a un culpable sería, sin duda, la interpretación.
Y esto de la interpretación lo digo porque nos ha costado, a algunos más que a otros, reconocer que la biblia solo es un compendio de historias de una sociedad primitiva y brutal a la que no le temblaba la mano a la hora de pasar a cuchillo a hombres, mujeres, niños de pecho e incluso vacas, camellos y asnos.
Salvando este pequeño escollo también hay que reconocer que la Biblia ha sido fuente de inspiración y por ese motivo vemos reflejado en templos, pinturas y esculturas, por solo citar algunas creaciones artísticas, sucesos que se relatan en ella. 
Siguiendo con el tema inspirador quiero decir que, incluso hoy en día, muchos creyentes piensan que tras estos libros se encuentra la iluminación divina, aunque los escépticos, entre los que reconozco que me encuentro, pensamos que la Biblia es fruto de la mano e imaginación humana.

¿Y cómo es ella?

La Biblia se presenta encuadernada en un solo volumen, pero en realidad es un conjunto de libros de extensión variable. Según dice Eslava Galán, una especie de cajón de sastre en el que se incluyen leyes, historia, profecías y proverbios, entre otras cosas, aunque yo creo que sería más adecuado denominarlo "cajón desastre" por lo que encontramos. 

Pues bien, estos libritos fueron escritos en hebreo, en arameo, incluso en griego antiguo, pero luego, no se sabe cuándo, fueron traducidos al griego común, dando a esta Biblia el nombre de Septuaginta y posteriormente al traducirse al latín, Vulgata
Y aquí comienza el jaleo, porque la Biblia, tal y como hoy la conocemos, es un texto consensuado por especialistas que han intentado reconstruir lo que "podría haber sido" la obra original. Aquí no estaría de más pensar que "cualquier parecido con la realidad podría ser pura coincidencia"

Pero vayamos al grano... ¿Qué vamos a encontrar en este libro y por extensión en la Biblia?

Pues, básicamente, un culebrón lleno de sorpresas y metáforas que nos va a mostrar a Dios con su compleja personalidad. Sin olvidar, por supuesto, el relato de las tribulaciones y aventuras del llamado "pueblo elegido", y lo pongo entrecomillado porque si algo nos ha quedado claro a lo largo de todo este tiempo es que, Yahvé, pese a lo que digan los expertos en Teología, ha descuidado a menudo las obligaciones contraídas con su pueblo preferido. 
Rompiendo una lanza en su favor quiero pensar que Yhavé quizás falló un poco a la hora de elegir a sus privilegiados, un pueblo que como veremos le traiciona a la menor oportunidad para irse a adorar a otros dioses más juerguistas, en resumen, más tolerantes. Es cierto que él podía haber elegido reinar sobre las grandes potencias de la época como hititas, asirios o egipcios, pero antes de admitir un error propio es mejor soltar lo de: "los caminos del Señor son inescrutables", indicando subrepticiamente que los seres humanos carecemos de la capacidad para comprender sus designios.

Sobre la imagen de Dios o su personalidad vamos a observar un perfil que se mueve por: Eterno, Todopoderoso, Omnisciente y Justo... aunque a veces también lo vamos a ver retratado como enojado, vengativo y un poco quisquilloso. 
Todo esto, insisto, lo digo siempre hablando desde el mayor de los respetos, no se me vaya a enfadar, que lo escrito, como ya he mencionado más arriba, tiene libre interpretación y el tonito lo ponemos cada uno.

Y mucho más...

Pero en este libro, La Biblia contada para escépticos, se va a hablar sobre muchísimos temas más, porque 176 capítulos, con proemio al comienzo y apéndice al final, dan para mucho.
Entre esos temas vamos a ver al detalle la conquista de la Tierra Prometida, incluyendo los saqueos, incendios y demás barrabasadas del pueblo elegido, sin olvidar mencionar los motivos por los que los ya mencionados cortaban los pulgares de pies y manos a sus prisioneros.

Vamos a entender el motivo de que en muchas representaciones aparezca Moisés con cuernos, y también añadirá unos apuntes muy interesantes sobre la comida Kosher. Porque todo hay que decirlo, Yahvé tampoco olvidó poner trabas a sus fieles en lo referente a la dieta.

Algo que a mí particularmente me ha llamado mucho la atención se esconde tras el capítulo dedicado al henoteísmo de Yahvé, algo que nunca me había parado a pensar y que se resume en que Dios reconoce la existencia de otros colegas que le hacen la competencia. Porque si no a qué viene ese comportamiento en ocasiones caprichoso de: "o me adoras como Dios único o te fulmino", eso es porque reconoce literalmente la existencia de otros.
Pero, y esto es preocupante, también denota que su memoria no es buena con el paso del tiempo porque según nos cuentan en el Génesis, Yahvé creó el Universo de la nada, los cielos y la tierra, y bla, bla, bla... el resto ya lo conocéis, y por lo tanto también al resto de dioses... no sé, esto empieza a ser muy contradictorio.

Y aquí llega el momento de hacer una nueva pausa para tomar aire y hablar de la extraordinaria leyenda del harén de Salomón, porque mucho se ha hablado de los juicios, pero sobre esto que tiene salseo se han olvidado pronunciarse. 
Pues bien, el harén de Salomón contaba con setecientas esposas, todas ellas princesas, más trescientas concubinas. 
Parémonos a analizar estas cifras. Mil mujeres, ¡todas juntas! A mí estas cifras sumadas a los 70 hijos de Gedeón y a los 969 años de Matusalén me llevan a pensar que los creadores de la Biblia de letras iban sobrados, pero de números más bien cortitos. 
Al hilo de la edad de Matusalén, también hay que señalar que estos narradores tan imaginativos poseían además una inclinación patológica hacia la exageración porque a la hora de contar los años hay que recordar que Noé vivió 950 y Adán 930. A mí que no me vengan a que esto de la longevidad se debía a que no había polución. Por mi parte nada más que añadir en este punto.

Entre los personajes que vamos a ir conociendo, que serán un montón, vamos a encontrar a Adán y Eva, a la repudiada Lilit, Abel y Caín, a la casta Susana, a Sansón... pero, sin duda, el más importante de esta historia será Jesús, algo que me lleva de nuevo a recordar las trifulcas entre el pueblo elegido y Yahvé, porque cuando llega Jesús y se presenta como hijo de Dios y, por consiguiente, como Mesías verdadero, no solo no lo aceptan, sino que lo crucifican. ¡Vale!, es cierto que eso lo hicieron los romanos, pero no me negaréis que empujados por los judíos, además no creo que haya que recordar que en su mano quedó el perdonarle la vida y de nuevo defraudaron a Yahvé escogiendo la libertad de Barrabás. ¡Vamos! que lo de tropezar varias veces en la misma piedra no es solo cosa de hombres.

Y ahora sí, creo que voy a ir terminando esta reseña que amenaza con alargarse demasiado. Eso sí, no sin antes hablaros un poco del plagio, una plaga que creemos del mundo moderno, pero que en cambio nos persigue desde la antigüedad, aunque no aparece citada como tal en la Biblia, porque esto de imitar y copiar viene de lejos y me lo pone fácil para hablaros de Noé. 
Sí, Noé el del Arca y el de la canción de los animales de dos en dos, porque está claro que muchas de las historias que se muestran en la Biblia no son más que narraciones sobre personajes extraídas de leyendas mesopotámicas. Basta leer algunos pasajes del poema de Gilgamesh para comprender que Ut-Napishtim escapó del diluvio universal con un arca enorme, y ese mismo relato aparece también en Asiria y en alguna leyenda Acadia. 
Por cierto que, Ut Napishtim también se escapó hace tiempo y apareció en otra de mis reseñas, en Mesopotamia. La invención de la ciudad.

Así que de esta forma pongo el punto y final. En el libro vais a encontrar historias de todo tipo; algunas muy entretenidas, aunque también hay que decir que otras aburren hasta a los muertos.
Espero haber despertado un poco vuestra curiosidad con este libro o al menos haberos arrancado una pequeña sonrisa, con solo eso me doy por satisfecha.

jueves, 22 de febrero de 2024

La casa de la noche de Jo Nesbo

Sinopsis:

Tras la muerte de sus padres, fallecidos en un trágico incendio, Richard Elauved tiene que mudarse a la remota localidad de Ballantyne, donde vivirá con sus tíos. Allí se convierte en seguida en uno de los marginados oficiales del instituto, algo que se acentúa cuando un compañero de clase llamado Tom desaparece en extrañas circunstancias: todos culparán al nuevo alumno, tan raro, retraído, irritable y taciturno.
Sin embargo, Richard vio con sus propios ojos lo que le pasó realmente a Tom, una escena verdaderamente espeluznante ocurrida en una cabina de teléfono cercana al bosque. Pero ni la policía ni nadie creen su versión... salvo Karen, otra estudiante arrinconada que lo empuja a llegar hasta el fondo de la cuestión.
Las pistas lo conducirán hasta una antigua casa señorial, ahora abandonada. Ante ella, muerto de miedo, rodeado de insectos, Richard descubrirá que lo observa, desde una ventana del cuarto piso, un hombre de rostro inexpresivo. Después, empezará a oír voces.

Opinión:

Tras un periodo de lecturas en el que iba de fracaso en fracaso y en el que no terminaba de encontrar ninguna que brillase con luz propia, me abracé a esta recomendación como Kate Winslet se agarró a su tabla salvavidas en la película Titanic de 1997. 
Ahora, tras su lectura, os puedo decir que, aunque descubrí desde los primeros compases el punto hacia el que derivaba el argumento, también agradezco el haber encontrado una historia compleja, con una atmósfera opresiva muy bien elaborada y que ha conseguido mantenerme pegada a sus páginas hasta el final.

La casa de la noche es la última novela de Jo Nesbo, un escritor y rockero que se ha convertido en los últimos años en superventas gracias a la serie policíaca protagonizada por el detective Harry Hole, una saga que también ha sido llevada a la pequeña pantalla.

Nesbo dice que sus mejores obras surgen del estado de duermevela, cuando uno no sabe si está despierto o continua dormido, y eso es precisamente lo que esconde este libro, un argumento desconcertante que nos hará dudar con cada página que leamos.

Con lo primero que nos vamos a encontrar es con una novela de estructura circular narrada en primera persona, es decir, una trama que comienza con la misma acción que finaliza y que parece incluir tanto situaciones surrealistas como alucinaciones y/o tergiversaciones de la realidad. 

Nuestro narrador, al que vamos a conocer tras un primer capítulo impactante, va a ser Richard Elauved, un adolescente que acaba de perder a sus padres en un incendio y que tiene que mudarse con sus tíos a la pequeña población de Ballantyne. 
En Ballantyne, una localidad en la que nunca pasa nada, Richard va a convertirse en el marginado oficial, situación que se agravará cuando empiecen a suceder cosas extrañas a su alrededor.

La novela se divide en tres partes, y en cada una de ellas el argumento experimentará un cambio tan radical de rumbo que tirará por tierra cualquier idea preconcebida que hayamos podido tener.
Esos giros argumentales sustentan el argumento e irán destapando otras historias más pequeñas que se esconden tras la trama principal.
Otro detalle interesante es que la obra está compuesta por capítulos muy breves que, sumados al brillante argumento y a los abundantes diálogos, aportan un ritmo vertiginoso a la lectura.

Otra cosilla que me ha gustado es el estilo empleado, tan parecido al de King, que valiéndose de elementos cotidianos consigue recrear una atmósfera fantástica, casi irreal.
Algunos lectores de La casa de la noche han comentado que el argumento no resultaba creíble, y ojo en este punto, porque no se puede conectar todo en una obra con la realidad. A veces la ficción es solo ficción, y este género permite a los autores dar rienda suelta a su imaginación. 
El que quiera realidad que se conforme con mirar por la ventana...

De todas formas, y esta es solo una opinión particular, los lectores debemos intuir que cuando un personaje nos relata en primera persona nos está ofreciendo su punto de vista, y puede ser verdad o mentira.
Es más... los lectores, observadores externos del argumento, podemos echar mano al proceso de deducción y por tanto encontrar una respuesta a base de eliminar todo lo que es o parece imposible, quedándonos solo con "lo posible", como si fuera una investigación holmesiana.

Si a parte de eso ya contamos con el comentario de Nesbo de que sus historias surgen en el estado de duermevela, ya debemos aceptar que podemos encontrarnos con paradojas imposibles, contradicciones, ausencia de leyes físicas en el sueño y/o alucinaciones.

En cualquier caso, hay que leer para disfrutar, y parece que hay lectores que sacan la lupa cada vez que cogen un libro de determinado autor. Me gustaría saber qué opinan o si buscan realismo en La metamorfosis de Kafka.

domingo, 11 de febrero de 2024

El sepulturero y la Tierra Negra de Oliver Pötzsch

El sepulturero y la Tierra Negra (Trilogía de El libro del sepulturero 02) 
Sinopsis:

Viena, 1894. En un sarcófago del Museo de Historia de la ciudad aparece, momificado, el cuerpo del profesor Alfons Strössner, uno de los mayores egiptólogos del mundo. Leopold von Harzfeldt será el encargado de la investigación y pronto descubrirá que, de los cuatro miembros de su última expedición a la Tierra Negra, tres han fallecido en extrañas circunstancias, por lo que la sombra de una maldición se cierne sobre lo sucedido. Pero ni Leopold ni el sepulturero Augustin Rothmayer creen en las maldiciones y están convencidos de que se trata de un asesinato. Con la ayuda de Julia, encargada de hacer las fotografías en otro caso importante del departamento de policía y con quien Leopold mantiene una relación secreta, los tres volverán a verse envueltos en un caso que oculta mucho más de lo que parecía a primera vista. 
Sarcófagos misteriosos, maldiciones egipcias y arqueólogos asesinados en un nuevo y frenético caso para el investigador Leo von Herzfeldt y el sepulturero Augustin Rothmayer. 

Opinión: El sepulturero y la Tierra Negra (Trilogía de El libro del sepulturero 02) 

Continuamos con la segunda entrega de la serie protagonizada por Leo von Herzfeldt, Julia Wolf y el sepulturero Augustin Rothmayer y que está ambientada en la Viena del siglo XIX; una saga que comencé a leer hace poco más de un año y que como ya comenté en su día, en El libro del sepulturero, encontré algunos detallitos que para mí la restaban la brillantez que se aplaudía desde otros blogs. 
Con esta nueva entrega vuelvo a coincidir en la opinión. 
Me ha entretenido, pero no entusiasmado. Me ha vuelto a parecer un argumento bastante plano, carente de chispa y que a cada paso que dan los personajes se volvía más previsible. 
También reitero lo que ya señalé, que algunas escenas protagonizadas por Julia me parecen demasiado forzadas.

En los personajes no vamos a apreciar una gran evolución, quizás el que más evoluciona es Leo, pero no es que me guste mucho hacia donde deriva su perfil, parece un barco sin vela ni timón y que no tiene rumbo definido.
Julia, para mi gusto, sigue siendo un personaje que intenta hacerse un hueco, no solo en la Viena de finales del siglo XIX, sino también en la novela, y eso que ya estábamos advertidos por el autor, porque en una entrevista comentó que ese perfil de investigadora, que el personaje parece tocar con la punta de los dedos, se alejaba bastante de la realidad de la época.
De Augustin Rothmayer, el sepulturero, pues sinceramente debo decir que no veo sentido a que se pasee libremente por las novelas como personaje determinante en las investigaciones, dando incluso título a la saga, y que en cambio se le relegue a un papel secundario totalmente desmerecido.

En el sepulturero y la Tierra Negra, Oliver Pötzsch vuelve a recurrir a temas que ya vimos reflejados en su anterior novela como el antisemitismo, la misoginia o el feminismo, y aquí sí que debo decir que se aplaude la buena ambientación que consigue sobre todo con el contexto social.

El argumento me ha parecido previsible, a pesar de que el autor crea tres investigaciones paralelas que lógicamente terminarán cruzándose.
Creo que el fallo radica en el exceso de clichés incluidos, algo que se está convirtiendo en algo común en la narrativa actual. Ese exceso convierte los hechos en predecibles y restan originalidad a la trama. 
En este caso vamos a estar viendo a lo largo de la historia un modus operandi similar al de algún asesino en serie que operó en Europa a finales del siglo XIX, lógicamente con alguna variación, y también veremos ideas repetidas en el mito de la momia y de la leyenda que se generó alrededor del descubrimiento de la cámara funeraria de Tutankamón en 1922, que va a ser la idea general sobre la que se construye esta novela. 
Es interesante ver la evolución que experimentó la arqueología durante ese siglo, pasando de ser una afición de ricos coleccionistas a una disciplina con método, rigurosamente científica, pero al margen de eso no creo que haya mucho más que sea digno de reseñar.

Como siempre digo, las opiniones sobre libros dependen de muchos factores, pero opino que más allá de un ligero entretenimiento pasajero, no le termino de encontrar a esta saga la brillantez de la que hablan en otros blogs.

Como nota curiosa final fijaros en la sinopsis de la editorial... 
Los personajes masculinos aparecen citados con nombre y apellido. Solo con ese gesto ya se les da un estatus superior al del personaje femenino que aparece mencionada solo con el nombre. 
Me gustaría recordar a la editorial que se llama Julia Wolf y que la igualdad se abre camino con gestos pequeños.


viernes, 26 de enero de 2024

Cómo vender una casa encantada de Grady Hendrix

Sinopsis:

Cuando Louise se entera de que sus padres han muerto, teme volver a casa. No quiere dejar a su pequeña con su ex y volar a Charleston. No quiere enfrentarse al domicilio familiar, donde se amontonan los restos de la vida académica de su padre y de la constante obsesión de su madre por los títeres y los muñecos. No quiere aprender a vivir sin las dos personas que mejor la han conocido y más la han querido del mundo entero. Sobre todo, no quiere tener que lidiar con su hermano, Mark, que nunca ha salido de Charleston, es incapaz de conservar un empleo y no lleva bien el éxito de Louise. Por desgracia, ella lo necesita, porque, para vender esa casa, va a hacer falta algo más que una manita de pintura y retirar los recuerdos de toda una vida. Pero hay casas que no se dejan vender, y la de Louise y Mark tiene otros planes para ellos dos… 
Grady Hendrix, autor superventas del New York Times, aborda el clásico de la casa encantada en una nueva y apasionante novela que explora hasta qué punto el pasado ―y la familia― pueden llegar a aterrarnos más que cualquier otra cosa.

Opinión:

Tenía muchas ganas de leer este libro desde que vi que saldría publicado, y lo cierto es que ahora me parece que he perdido un poco el tiempo. 
Y que conste que ya iba avisada.

De Grady Hendrix ya había leído un par de libros, podéis buscarlos por autor porque aparecen reseñados en el blog, pero creo que este escritor y guionista, que entró en el mundo literario pisando fuerte, ha ido perdiendo fuelle con cada nueva publicación.
Esto como podéis comprobar es una opinión particular que no hay que compartir, porque si buscáis por la red encontraréis montones de opiniones entusiastas sobre este libro, e incluso, a lectores que comparan a Hendrix con King, llegando incluso a hablar de que es una nueva alternativa dentro del género de terror. 
Como siempre os digo... para gustos los colores.

De Cómo vender una casa encantada puedo deciros que comienza bien, pero antes de llegar a la mitad todo el argumento empieza a dar vueltas sobre sí mismo, como pollo sin cabeza.
Hendrix utiliza elementos típicos del género de terror, intentando dar un nuevo giro a las historias que ya conocemos, pero para mi gusto no lo consigue.

¿El fallo? que incluye en la narración demasiados clichés del género de terror, y todos ellos juntos terminan restando originalidad. 
Casas encantadas, muñecos diabólicos, una familia que en vez de enfrentarse a los problemas se esconde de la realidad refugiándose en el pasado, el dolor del duelo, todos esos elementos son demasiados para meterlos en el mismo saco si no los trabajas o te olvidas de algunos a la mitad del relato.
¿Y por qué digo esto?, pues sencillo, porque empezamos hablando de casas encantadas, pero parece que a mitad de camino el autor decide cambiar el rumbo de la novela, destierra esa idea que nos acompañaba desde el título e incorpora un elemento nuevo, el de los muñecos poseídos.

Por otro lado, he leído por ahí que este autor suele mezclar el terror con toques de humor negro, pero sinceramente, no he encontrada nada de ninguno de los géneros.
Creo que los amantes del terror queremos pasar miedo, pero Pupkin, el muñeco protagonista, solo resultaba irritante y me infundía unas ganas tremendas de darle un buen sartenazo cada vez que repetía "pipicaca".
Esto de la ausencia de terror, no os vayáis a pensar que es una opinión que solo comparto yo, porque la protagonista de carne y hueso de la novela, Louise, tiene más miedo a enfrentarse a una relación con su hermano que a los muñecos que atiborran cada uno de los rincones de la casa familiar. Es decir, en vez de temblar ante la idea de entrar en la casa, tiembla por no saber enfrentarse a su familiar más directo...

Pero, ¿y qué pasa con el resto de personajes?
Pues que ninguno deja huella. Pasan por la historia sin pena ni gloria y llegué a un punto en que me daba lo mismo lo que les sucediera, solo quería acabar con el martirio que me estaba provocando Pupkin , que me irritaba hasta la extenuación.

Mi conclusión final es que es un título que dice mucho, pero un libro que dice muy poco, sin contar con algún agujerillo argumental llegando casi al final del que ni el autor sabe cómo salir.